La infusión es una forma de preparar las plantas conseguida a partir de echar agua caliente, que no haya alcanzado la ebullición sobre hojas o flores. Después la dejamos reposar durante unos minutos para que los principios activos pasen al agua y filtramos”.
Por otro lado, el té es el resultado de infusionar la planta del té en cualquiera de sus variantes, sola o acompañada de otras plantas o frutos. Y, por último, la tisana es la infusión de una mezcla de plantas normalmente con fines terapéuticos. En ocasiones y cuando la mezcla lleva raíces o tallos se prepararía por decocción”.
Los resfriados y las gripes protagonizan los meses de frío. Además, la preocupación por mantener el sistema inmune fuerte ha crecido en los últimos meses. Existen varias infusiones que pueden ayudar a aliviar los síntomas causados por estas enfermedades.
- Regaliz: La infusión de regaliz es una de las más populares porque este palo dulce tiene muchas propiedades medicinales. Sirve para aliviar la tos y los síntomas de los resfriados por sus cualidades antivirales y antiespasmódicas. Además, tiene un compuesto llamado glicirricina que tiene una estructura parecida a los corticoides. Por otro lado, el regaliz tiene vitaminas de los grupos A, B, C y E, y minerales como como calcio, magnesio, fósforo y hierro.
- Eucalipto: Uno de los síntomas que tenemos cuando nos resfriamos es el taponamiento de las vías respiratorias que nos impide descansar. Para este malestar, el eucalipto es el remedio adecuado ya que tiene propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas y expectorantes. Las infusiones que contienen eucalipto pueden, según explican desde Physalis, “aliviar los síntomas de las dolencias de invierno, asegurando una respiración más libre y suavizando la garganta”.
- Canela: Una de las propiedades más potentes de la canela es su acción antiinflamatoria. De hecho, en el año 2015, un grupo de investigadores llegó a la conclusión de que la canela de Sri Lanka es uno de los antiinflamatorios más potentes del mundo. Por otro lado, posee efectos antifúngicos y antibacterianos, por lo que es buena aliada contra los resfriados.
- Saúco: La infusión de saúco se utiliza para combatir la fiebre y aliviar la tos y otros síntomas de enfermedades respiratorias como bronquitis y resfriado. Además, si se hace gárgaras, alivia el dolor de garganta. De hecho, investigadores australianos confirmaron en un estudio que la suplementación con baya del saúco reduce la duración del resfriado y sus síntomas.
- Malva. La malva es otro aliado para este invierno. Se utiliza para los resfriados en los que hay mucha congestión y tos, y en otras patologías como faringitis, laringitis y bronquitis. Uno de sus beneficios es que calma la irritación de las mucosas.
- Jengibre: Los componentes del jengibre tienen una poderosa acción antiinflamatoria como los gingeroles, la curcumina o la capsaicina. Estos beneficios nos recuerdan a la cúrcuma, que contribuye a la reducción de la liberación de los mediadores inflamatorios.
- Tomillo: Si buscamos un remedio para el refuerzo del sistema inmune, es este. Uno de sus componentes es el timol que tiene una acción fungicida. Pero el tomillo tiene muchas más propiedades, por ejemplo, ayuda a expulsar el exceso de mocos y flemas, y también combate bacterias y virus, además de su acción inflamatoria.
- Equinácea: Uno de los puntos fuertes de la equinácea es que ayuda a acortar las gripes y resfriados y alivia la sintomatología. De hecho, autoridades sanitarias europeas como la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y la European Scientific Cooperative on Phytotherapy (ESCOP) avalan este uso. Desde Physalis explican que la equinácea “apoya nuestra resistencia natural y contribuyen a la protección natural”. En la medicina ayurvédica encontramos la andrographis, que posee las mismas propiedades para estimular las defensas que la equinácea.
- Infusiones de anís, clavo, manzanilla o poleo menta: Probablemente estas infusiones son de las más conocidas a nivel popular. Tienen propiedades calmantes y además actúan contra la congestión. En el caso de la manzanilla, calma los problemas digestivos que se puedan derivar de los resfriados. Por supuesto, si añadimos a las infusiones miel o limón, los beneficios se duplican, señalan los expertos.
- Plantas medicinales febrífugas: Para la fiebre existen una multitud de plantas que tienen propiedades febrífugas como la ulmaria, el sauce blanco, cardo santo, eupatoria o el tilo, entre otras.
También en invierno nos ayudan las infusiones que nos aporten en los procesos de riñones y vejiga. Son varias las plantas que ayudan:
- Gayuba: Nos ayuda en procesos infecciosos urinarios y de vejiga. Propiedades antisépticas y antiinflamatorias, está indicada para tratar infecciones en el tracto urinario, como cistitis, uretritis, prostatitis en el varón y vaginitis en la mujer.
- Abedul: Además de ser diurética, su jugo protege el útero y la vejiga, ayuda a disolver las piedras y e antianémico. Propiedades antisépticas y antiinflamatorias,
- Cola de caballo: Depurativa renal y excelente drenador, diurético y remineralizante. Nos sirve también en procesos invernales como gripales y resfriados, también para fortalecer el cabello, las uñas, la piel, por su alto contenido en silicio orgánico.
- Brezo: Propiedades antibióticas y antisépticas urinarias. Se puede tomaren infusión o de una manera mucho más dulce, la miel de brezo, que aparte de de aportarnos las propiedades nos ayuda en estados convalecientes.
- Vara de oro: Sus usos van desde el proceso renal y gran diurético, hasta desinflamatorio. Útil también para procesos de bajón emocional.